Pantallas flotantes sumergidas para la contención de sedimentos de obra
Las cortinas antiturbidez (o barreras antiturbidez) fabricadas por Markleen, aíslan la zona de obras en puertos o en cualquier otra operación de dragados, del exterior, reduciendo de forma importante el material en suspensión procedente de la obra más allá de los confines de la misma.
La cortina antiturbidez, que suele ser de un material geotextil poroso, normalmente se despliega con un elemento de flotación sólida como por ejemplo una barrera de contención de hidrocarburos convencional. La profundidad de la cortina debe elegirse para garantizar la contención suficiente de los sedimentos, sin llegar a tocar el fondo marino.
Su posicionamiento ha de tener en cuenta la forma de la zona a proteger, así como las mareas y las corrientes marinas para tener una mayor efectividad.
CORTINAS ANTITURBIDEZ MARKLEEN
